Addictware | Noticias de Tecnología - Instituciones financieras; Después del COVID-19

Las organizaciones que piensan en detener sus proyectos de innovación en un esfuerzo por ahorrar costos debido al estrés financiero que enfrentan durante esta crisis saldrán con una desventaja y pondrán en peligro sus cuotas de mercado. 

Stephane MathieuEl COVID-19 ha generado un cambio en las acciones, actitudes y comportamiento de las personas. ¿La gente está obligando a las instituciones financieras a desarrollar mejores soluciones digitales?

El uso de aplicaciones móviles es mucho más fácil y sencillo de organizar para usuarios finales e instituciones, por lo que después de que termine la revolución pandémica, estas buenas prácticas permanecerán en la economía global como canales interactivos fundamentales. El desarrollo de la banca digital comenzó como apoyo para otros productos o servicios y hoy se está convirtiendo en uno de los principales canales de captación de clientes y negocios de las instituciones financieras mundiales. Y ahora estas mismas instituciones tienen que innovar dentro del muy competitivo mundo digital, algo que resulta ser algo relativamente nuevo para ellos.

Las transacciones bancarias actuales en la sucursal física son, también, cosa del pasado, ya que la propuesta (pobre) de valor digital de las instituciones financieras ya se está convirtiendo en algo obsoleto. Todos sabemos que hoy en día -digital- no significa atractivo, innovador y sin fricciones, seamos honestos, “parchar” el agujero digital con una aplicación bancaria de mal gusto, ya no es suficiente. Los clientes (es decir, los usuarios) necesitan mucho más y ahora, con el distanciamiento social como acelerador de los cambios en el comportamiento humano, es cada vez más obvio e inevitable que nuestra vida analógica y digital tengan que coincidir y converger.

La historia nos dice que después de la crisis global más dramática como la que estamos padeciendo ahora, la pandemia del virus corona COVID-19, las economías del mundo vuelven a la acción con las necesidades del nuevo entorno.

Los bancos y las instituciones de crédito deben aprovechar este tiempo para ser disruptivos romper y considerar reinventarse de adentro hacia afuera, es el momento en que necesitan comprender cómo los clientes esperan que las instituciones financieras trabajen para apoyar sus nuevas vidas analógicas y digitales. Esto incluye cómo los bancos y las instituciones de crédito usan datos, inteligencia artificial, tecnologías de aprendizaje automático y habilidades para impactar los mercados financieros mundiales con marketing preciso, productos y divergencias e interrupciones de servicios para que los humanos podamos encontrarlo más atractivo y más sencillo de adoptar.

Las organizaciones que piensan en detener sus proyectos de innovación en un esfuerzo por ahorrar costos debido al estrés financiero que enfrentan durante esta crisis saldrán con una desventaja y, por el mismo motivo, pondrán en peligro sus cuotas de mercado. En este momento, existe una gran oportunidad para reevaluar cómo las tecnologías, el conocimiento, los datos, la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y el análisis predictivo pueden acelerar el crecimiento futuro y la competitividad de las instituciones financieras a nivel mundial.

Incluso antes de la crisis, los clientes ya exigían funcionalidad, la inversión no debe disminuir a pesar de la crisis. ¿Nos estamos moviendo lo suficientemente rápido y con la velocidad necesaria? La mayoría de nosotros estamos haciendo todo lo posible para mantener un ritmo aceptable durante esos tiempos difíciles, ¡y esta es la clave! Disminuir la velocidad nunca debería ser una opción.