Addictware | Noticias de Tecnología - La estrategia del juego para triunfar en la era de la misión crítica

Las inversiones en virtualización, nube y almacenamiento más innovador son parte del esfuerzo por reforzar la disponibilidad en la era de la misión crítica, pero los incidentes continúan ocurriendo, sea por fallas en los sistemas, ataques o simplemente por errores humanos.

Jan Ryniewicz Director de MKT Veeam Latam bajaHoy las organizaciones dependen de la tecnología aún más que antes: las redes son un activo cada vez más estratégico, es creciente el número de aplicaciones que se suben a la nube y los usuarios hacen mayor uso de los datos del negocio a cualquier hora y a través de cualquier dispositivo. En este escenario, la necesidad de contar con seguridad y confiabilidad totales para garantizar un acceso continuo y eficiente a esas redes, aplicaciones y datos se ha incrementado considerablemente.

La disponibilidad es un tema más complejo que nunca debido a que la infraestructura de TI es cada vez más heterogénea: los sistemas de misión crítica de la actualidad se ejecutan en una combinación de ambientes virtuales y físicos, tanto on-premise como en la nube, para cubrir las necesidades de usuarios que requieren acceso completo a un mayor volumen y diversidad de datos, en cualquier momento, desde cualquier ubicación y con cualquier dispositivo.

Las inversiones en virtualización, nube y almacenamiento más innovador son parte del esfuerzo por reforzar la disponibilidad en la era de la misión crítica, pero los incidentes continúan ocurriendo, sea por fallas en los sistemas, ataques o simplemente por errores humanos.

Por todo esto, la nueva estrategia de juego consiste en asegurar la continuidad del negocio y la hiper disponibilidad de datos, aplicaciones e infraestructura con una visión más allá de lo tradicional, a través de una gestión inteligente de datos. Las organizaciones que desean convertirse en empresas permanentemente activas deben considerar las siguientes reglas para tener éxito en la estrategia:

Regla # 1. Flexibilidad y escalabilidad a gran escala

A nivel tecnológico, lo único constante es el cambio. Los negocios deben tener presente la necesidad de una flexibilidad a gran escala al decidir los modelos computacionales, plataformas, aplicaciones y demás infraestructura en su entorno, de forma que las cambiantes necesidades y capacidades de la tecnología no afecten su planeación.

Asimismo, es vital que los profesionales de las TI cuenten también con niveles de escalabilidad que permitan tener redundancia para optimizar y garantizar el desempeño y funcionamiento de las aplicaciones.

Regla # 2. Hiper disponibilidad garantizada

En la era de la globalización y los negocios digitales, las empresas no pueden permitirse tiempos de respuesta lentos; menos aún caídas en los sistemas y aplicaciones. De acuerdo con el Reporte de Disponibilidad 2017 de Veeam, el 43% de los profesionales de las TI en México consideran que 15 minutos o menos sería el tiempo que su organización puede tolerar el que una aplicación crítica esté inactiva. Con todo, 67% de ellos presentan alguna inactividad no planeada de 1 a 10 veces al año, y para 37% de los encuestados estas interrupciones duran entre 21 minutos y 4 horas.

La hiper disponibilidad garantizada se logra con una estrategia que vaya más allá del respaldo y la recuperación tradicionales, permitiendo a las áreas de TI ser capaces de identificar las fuentes potenciales de interrupciones o tiempos de inactividad antes de que ocurran, lo cual es imperativo para las organizaciones que busquen montarse a la ola de la transformación digital.

Regla # 3. Seguridad máxima

En el mundo virtual y de nube, las aplicaciones e información críticas del negocio pueden encontrarse más vulnerables a hackeos, malware, pérdida y robo de datos, etcétera. De igual forma, la infraestructura de respaldo corre peligro de ser atacada, por la relevancia de la información que ahí se resguarda.  Es trascendental conformar una iniciativa de seguridad que contemple las mejores prácticas en la materia.

Regla # 4. Acuerdos de niveles de servicio bien planeados

Los acuerdos de niveles de servicio (SLA) deben revisarse a fondo. El objetivo es que realmente plasmen los objetivos de negocio; es decir, que el enfoque sea alcanzar tiempos de recuperación no mayores a 15 minutos.

Ciertamente, cada vez es más difícil cumplir con los SLAs por los desafíos planteados líneas arriba. Sin embargo, esto es prioritario para que el negocio realmente alcance la disponibilidad que precisa para operar como una empresa permanentemente activa. La clave está en contar con servicios bien diseñados y procesos sólidos, con la flexibilidad adecuada para que los compromisos se cumplan.